CUNDE “EL MAL EJEMPLO” IRANIO

Visires y Reyes no se Dejan Ya Seducir por Sirenas de Frac

Por Victor Almagro

EXCLUSIVO

PARIS. (Especial) —       Los malos  ejemplos cunden muy rápidamente, deben opinar los directorios de las compañías petroleras al examinar las últimas estadísticas. Los movimientos de Persia, Egipto y el Líbano están proyectando una extraña influencia en todo el mundo árabe.

La nacionalización del petróleo iranio ha dado algo que pensar a los tímidos gobiernos de Arabia Saudita e Irak. Si su debilidad no les permite enfrentar a las compañías extranjeras, por lo menos les deja  el camino de las escaramuzas.

El acuerdo que concluyó en 1950,  ya obligaba a la Arabiana American 0il Co,  a entregar el 50 por ciento de sus beneficios al gobierno de Arabia Saudita. Pero a pesar de que estas condiciones eran más favorables que las obtenidas por cualquiera de los otros gobiernos vecinos, en mayo de este año el gobierno decidió revisar el acuerdo. La proposición del gobierno árabe es mantener el 50 por ciento de los beneficio, pero considerándolos previamente a la deducción de los impuestos norteamericanos, ya que hasta ahora esos impuestos debían correr a medias.  Esta nueva proposición aumentaría notablemente las entradas del gobierno: considerando que la Arabian American Oil, es la más importante de las compañías que explotan el petróleo del país.

Por su parte el Irak, que a pesar de mejorar las condiciones del gobierno en acuerdos sucesivos estaba lejos de acercarse a la situación de Arabia Saudita, ha salido también a la palestra. El nuevo acuerdo firmado por el gobierno del Irak y las compañías extranjeras establece:

1)        Que el gobierno percibirá la mitad de los beneficios realizados por la Irak Petroleum y sus filiales que, según el cálculo de la compañía, alcanzará treinta y un millón de libras esterlinas durante este año y llegará a 60 millones en el año 1955.

2)        La Irak Petroleum y la Mosul Petroleum en conjunto deberán producir a partir de 1954, 22 toneladas brutas por año. Y la Basrah Petroleum deberá extraer ocho millones desde 1955 en adelante.

3)        Las entradas totales del gobierno no serán Inferiores al 25 por ciento del costo de todo el petróleo bruto producido por la Irak Petroleum,  la Mosul Petroleum, y el 33 1/3 del valor del petróleo bruto producido por la Basrah Petroleum.

 4)       El gobierno tiene derecho a descontar de sus beneficios un 12 ½ por ciento del petróleo producido por cualquiera de estas tres compañías y que esté dedicado a la exportación. En ese caso también puede venderlo en el mercado internacional a los precios mundiales.

5)        La parte de las ganancias del gobierno, salvo caso de fuerza mayor, no serán inferiores en el año 1953 a 20 millones de libras esterlinas, y 23 millones desde 1955 en adelante.

6)        En el caso de que las compañías por causas extrañas se vieran obligadas a suspender la explotación, ellas reembolsarían cinco millones de libras anuales al gobierno, por un máximo de dos años.

7)        El acuerdo prevé un aumento eventual de ciudadanos del país en las actividades de las compañías y dentro del consejo de administración.

Este informe dado por la Irak Petroleum revela el firme propósito del gobierno de ir ganando terreno frente a las compañías. Este acuerdo es la medida de su fuerza.

 Pero la ola de estímulo ha llegado también a Qatar, cuyo cheik presentó sus nuevas demandas a la Petroleum Development Ltda.  Por su parte Turquía también hace oír su voz, ya que un convenio anglo-turco-iraqués le otorga el 10 por ciento de las ganancias petroleras del gobierno de Irak…

Es indudable que éstos no son los tiempos de oro de Gubelkian y Deterding.  Los visires y reyes no se dejan seducir por las sirenas vestidas de frac.

Artículo publicado en el Diario Democracia

Edición del Domingo, 5 de Octubre de 1952 (pág. 1)

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